Para ti

Eres mi amigo, por eso te escribo con sinceridad y cariño. Sabes que nunca te he mentido y creeme cuando te digo que no lo empezaré a hacer ahora.

No te extraño ni te necesito. Me importa lo que te pase sólo en la medida de lo que me afecte. Nada va a cambiar, ya no cambió ¿porqué habría de cambiar ahora?. Lo siento, paso por el momento más realista de mi vida y no tengo ganas de salir de el. Sí, romanticón el gesto, lindo, lo que querai, pero ATINA! se te pasó el tren, los cinco minutos, la oportunidad, etc., tú te quisiste quedar ahí ahora cométela. Si tienes problemas no es asunto mio, si ahora quieres escapar del ahogo, escapa solito no más que ya te di la mano y no la tomaste. Si antes tenías miedo y ahora tienes más miedo que antes es por que tú te lo buscaste, harto tarde que te cayó la teja. Asume las consecuencias de tus actos como el valiente que vas a tener que ser y deja de andar quejandóte y buscando soluciones donde está claro que el final es una predestinación que tú no quieres ver. Aprende a andar solito que harto te hace falta. Me aburrí de acordarme de ti, no quiero hablar contigo, no quiero verte, no me interesas así que chao no más.

Igual vamos a seguir hablando, pero más adelante supongo, cuando haya cosas nuevas que contar, por ahora sólo puedo decir que te vaya lindo y no te preocupes que si te veo en la calle igual te voy a saludar: nunca tan mala onda!.